sábado, 28 de enero de 2017

MI CONFRONTACIÓN CON LA DOCENCIA

Mi profesión de origen es licenciada en psicología, comencé la docencia en el año 2014 dando clases a nivel bachiller las materias de orientación educativa y psicología, después de algunas prácticas escolares me comenzó a gustar el ámbito de la educación, comencé a investigar un poco más acerca de ¿Qué era una planeación? ¿Cómo se hacía?, cuando me ofrecen este trabajo me dan un temario el cual yo tenía que abarcar a lo largo de los semestres con los alumnos. En el cual podía utilizar las actividades, proyectos, trabajos, tareas, salidas etc.  De manera autónoma siempre y cuando fueran justificadas y apropiadas para y en función del temario establecido.  De ahí el gusto por la docencia comenzó, luego viene un giro y entro a ser docente en el nivel primaria y ahí es cuando cambia todo ya que no contaba con la experiencia suficiente trabajando con niños pequeños de seis años, estaba asustada.
¿Qué pienso y siento de ser profesor?  Yo en lo personal siento orgullo de ser profesora, porque soy una persona que guía y acompaña a los alumnos a aprender algo, además de enseñar temas y actividades los alumnos siempre me enseñan algo nuevo para mí y a ser mejor persona a diario, siempre interactuó con los alumnos que son niños; aprendo de ellos cada día, entro a su mundo de cómo ven las cosas y vuelvo a pensar como ellos.  Aunque hoy en día muchas personas ven a los maestros con poco valor o los denigran por serlo, por la situación que vive el país; deben comprender que la educación sigue siendo un pilar muy fuerte en la vida de las personas y que gracias a los maestros que ponemos el  granito de arena para intentar cambiar las cosas tenemos generaciones de personas profesionales.  
Para mí ha significado mucho ser maestra, aunque llevo poco tiempo ejerciendo, y poco experiencia en dos año; he aprendido muchas cosas en tan poco tiempo no tenía mucha experiencia trabajando con niños de 6 años y llegaba a pensar que no tendría la paciencia necesaria para trabajar con ellos pero sin en cambio fui aprendiendo muchas cosas de ellos, su forma de pensar, sus gustos hoy; escucho siempre las opiniones positivas o negativas de mis compañeras de trabajo y las tomo para mejorar y aprender, y reflejarlo en mi trabajo. Así como en la lectura nos dice modificar algunas cosas para lograr aprendizajes. Todos los días se aprende algo nuevo y yo sigo aprendiendo gracias a las experiencias que hay dentro del salón de clases y de mis compañeras mayores que yo que son un ejemplo para mí.
Me brinda de satisfacción que los alumnos se hacen independientes, que aprenden algo, que logran realizar un ejercicio o copiar un texto, que aprenden a realizar operaciones básicas, que son alumnos, que reflejan valores hacia las personas, que son respetuosos con los demás, responsables, etc. Que como docente estoy haciendo un trabajo para que el día de mañana que me encuentre un ex alumno vea lo lejos que ha llegado.
Los motivos de insatisfacción son que hoy en día por muchos motivos hay niños en el abandono, falta de cariño, no los apoyan con sus tareas, papas separados; lo reflejan los alumnos en el salón de clases y a veces el no poder hacer más de lo permitido. Otra insatisfacción es ver que hay docentes que ya no se preocupan por dar sus clases, ejemplo: en solo poner un dictado o hagan un resumen y con eso evaluarlos.

Ana Karen Cadena Medrano


LA AVENTURA DE SER DOCENTE

Es una aventura donde todos los días encuentras algo nuevo que descubrir, que aprender, que enseñar, que buscar, que preguntar; nunca hay un descanso no solo se trata de ser el profesor que enseña, eres el guía, el motivador, el psicólogo, el amigo; te conviertes en muchas personas a la vez en un solo llamado maestro. En el cual si no te actualizas, si no lees, si no aprendes, si no te preparas, no te superas mas, no innovas o aplicas nuevas estrategias, técnicas, dinámicas o juegos para lograr enseñarle algo a tus alumnos caes en la monotonía de “otra ves empezar la semana”, “otra clase mas” “otra ves lo mismo”; se vuelve fastidioso, aburrido, rutinario y todo eso lo trasmites al alumno, ese malestar docente lo ves reflejado con las faltas constantes o ausencias de tus alumnos.
Pienso que ser maestro es un trabajo hoy en día poco valorado por las personas, la gente siempre critica tu trabajo sin saber realmente lo que es esta profesión, lo que sacrificas por lograr transmitir y enseñar algo a los demás.   Yo en lo personal lo veo a diario en la escuela donde trabajo hay dos grupos de primer año en nivel primaria, y como dice la lectura es muy cierto y lo compruebo si no cambias tu mentalidad y descubres tu identidad te será imposible o te aburrirás en esto un ejemplo que tengo muy claro es  la maestra del otro grupo tiene mucha experiencia, no dudo que sea una gran maestra pero no cambia su mentalidad y acepta que son nuevos tiempos, diferentes alumnos, necesidades educativas y solo brinda los contenidos por darlos. Hay ocasiones en que nos toca trabajar en conjunto y es muy difícil lograrlo por que ella no quiere salir de su zona de confort, yo lo que aporto es realizar actividades en conjunto, dinámicas, juegos para integrar y lograr que se conozcan los alumnos de ambos primeros. Incluso hay veces en que se deben hacer proyectos de ciencia y ella solo comenta “mi grupo no participa por que me es más prioridad que aprendan primero a escribir”. Ella no acepta cosas nuevas a su grupo; el cual se ve reflejado en la ausencia de niños en su grupo.
Sin duda alguna en mi poca experiencia que llevo, lo que he aportado a mis alumnos sin duda es hacerlos sentir seguros de si mismos, motivarlos a que participen, a que comenten las lecturas, a que pasen a explicar algo frente a los demás y sobretodo llegar yo como maestra con una buena actitud, ser responsable, tolerante, respetuosa, puntual, a antes de comenzar la clase dedicar diez minutos a un juego o a preguntarles ¿Cómo están?, ¿Cómo amanecieron?, ¿están listos para el día de hoy? Etc. Aunque parezca tonto funciona mucho ya que detectas algún niño que tenga algún problema emocional, que lo hayan regañado, o que esta pasando por un mal momento, esto para cambiar su perspectiva del niño y hacerlo sentir bien, seguro y deseando ya incluirse a la clase con los demás. 
En los casi dos años que llevo de maestra sigo teniendo todos los días esa curiosidad de seguir aprendiendo de los niños, de tratar pensar como ellos en su mundo, esa emoción de estar frente al grupo y comenzar el tema o el ejercicio, sentir nervios y a la ves la seguridad en mi de que puedo hacerlo, esa motivación de tener una satisfacción de un día mas frente a mi grupo, frente a mis diecinueve alumnos.


Ana Karen Cadena Medrano